Clemente

(from Clemente's Facebook page 3-23-20)

En estos tiempos duros para todos os enseño el trabajo artístico de la fotógrafa
- @katharinecooper quien me siguió durante mi preparación y la corrida de St Sever

Lozano Hermanos

Propietario

Agrícola La Sagra S.L

 

Señal

Hendido en ambas

Fincas

Alcurrucén, Pedro Abad (Córdoba), La Mudiona, Alcollarín (Cáceres) y El Cortijillo, Urda (Toledo)

Procedencia

Alcurrucén

Antigüedad

19/03/1999
 

Antecedentes

Lozano Hermanos fue creada en 1996, con vacas y sementales de “Alcurrucén”. En 2003 completa la prueba de la Unión de Criadores de Toros de Lidia, pasando al Grupo Primero tras lidiar con resultado satisfactorio los festejos reglamentarios, compuestos por dos corridas de toros y cuatro novilladas con picadores. Por su parte, El hierro de El Cortijillo fue creado en 2001 con todas las vacas y sementales de la ganadería de “Palomo Linares” de origen don Carlos Núñez, aumentada con vacas y sementales de “Alcurrucén”. En 2009 pasa a formar parte del Grupo Primero de la Unión de Criadores de Toros de Lidia.

Jose Luis Pereda

Propietario

Señal

Horquilla dcha. hoja higuera izda.

Fincas

La Lanchuela (La Nava, Huelva), La Dehesilla (Rosal de la Frontera (Huelva)

Procedencia

Nunez

Antigüedad

01/04/1956
 

Antecedentes

Su antigüedad es del 1 de abril de 1956, estando en propiedad de Saturnino Pérez Alonso. Su viuda vende el hierro a Manuel Ucha Vázquez y éste a Rafael Beca Gutiérrez, que lo anuncia a nombre de Hermanos Beca Belmonte. En 1979 es adquirido por José Luis Martín Berrocal, de quien lo compra José Luis Pereda, quien poco después lo encasta en la sangre Núñez a través de las vacas adquiridas también del hierro de Núñez Hermanos que por aquel entonces era propiedad también de Berrocal.
 

Encaste

Se denominan reses de encaste “Núñez” a las que proceden de la ganadería formada a partir de 1938 por Carlos Nuñez Manso, con origen en la ganadería de Parladé, por vía de la de Manuel Rincón. En 1941 se añadieron reses de Mora Figueroa (García Pedrajas - Conde de la Corte), también pura de Parladé. Ese mismo año se aportó una segunda sangre procedente de la ganadería del  Marqués de Villabrágima, antigua del marqués de Villamarta.

A partir de los años cuarenta del pasado siglo comenzó el éxito de los “Núñez” y todas las figuras del toreo los demandaron.

Es éste un toro de personalidad y características  contrastadas. Si bien es cierto que se pueden leer en sus hechuras las procedencias diferentes de Villamarta y de Parladé - Rincón, también lo es que ésta es una cuestión sólo apta para entendidos. El toro de procedencia Parladé es más bajo, menos levantado del suelo y menos “montado” que el de Villamarta. Es más badanudo, hondo y cuajado. Es estrecho de sienes, bien conformado de cuerna y acapachado a veces.

El toro con predominio de la sangre Villamarta es más montado y engallado de salida, menos hondo, más fino, astiblanco,  astifino y de cornamenta “tocada” a veces. Las pintas del toro de Villamarta van de los colorados, castaños, listones, chorreados a los negros, girones, calceteros... Las de los de Parladé son menos variadas. El comportamiento  del toro de Núñez mezcla la nobleza del toro parladeño y la casta del de Villamarta.. El “núñez” ideal es un ejemplar de poco peso, caja regular y fino de hechuras.

Así fue el único indulto en La Misericordia de Zaragoza

Revive la histórica lidia de 'Quejoso', de Los Maños, por parte del castellonense Varea

https://www.mundotoro.com/noticia/indulto-la-misericordia-zaragoza-varea/1552592

El Juli en Madrid

24 May, 2018

Gavira

Propietario

Ganadería Gavira CB.

Representante

Don Salvador Gavira García.

Señal

Dos muescas en ambas.

Fincas

Soto de Roma y La Alquería, Jerez de la Frontera (Cádiz) y Vegablanquilla y La Gotera, Alcalá de los Gazules (Cádiz).

Procedencia

Domecq Díez.

Antigüedad

21/06/1933
 

Antecedentes

Procede esta ganadería de la antigua de Raso del Portillo, que a efectos históricos se consideró como la más antigua y cuyas reses gozaban del privilegio de abrir las plazas en las corridas reales. Los dos primeros propietarios parece que fueron don Toribio y don Victorino Valdés, de quien la heredó don Pablo Valdés Sanz, y que después de sucesivos cambios pasó en 1910 a don Matías Sánchez Cobaleda, quien en 1921 la traspasó a don José Marzal, el cual cambió el hierro por el que actualmente utiliza y la aumentó con vacas y un semental de la viuda de Soler, de origen Ibarra, Parladé y Conde de la Corte, eliminando todo lo anterior. A estas vacas procedentes de Soler, se les incorporaron en los años 1927 y 1931 sementales de Pablo Romero y Conde de la Corte. En 1943 adquirió la ganadería don Marcelino Rodríguez y en 1958 la vendió a don Salvador Gavira Sánchez. Desde 1976 la ganadería se anunció a nombre de don Salvador y Antonio Gavira. En 1985 se refresca la sangre con 46 vacas viejas y un semental de “Toros de El Torero” propiedad de don Salvador Domecq.

Encaste

ENCASTE DOMECQ DÍEZ El fundador de esta estirpe de ganaderos, Juan Pedro Domecq y Núñez de Villavicencio, compró a principios de 1930 la ganadería del Duque de Veragua a Manuel Martín Alonso quien se había hecho con el hierro ducal dos años antes. Domecq y Núñez de Villavicencio debutó con una novillada en 1931 en la plaza de Cádiz. La primera ocasión que lidia en Las Ventas fue precisamente en la corrida de inauguración. Pero la historia de este encaste circula por buen camino desde el principio, Juan Pedro hace caso de las recomendaciones que Ramón Mora Figueroa le dio con buen tino, por lo que adquirió al Conde de la Corte cuatro sementales: Llorón, Carabello, Chucero y Bodeguero y dos puntas de vacas entre 1930 y 1931. Tras el fallecimiento en 1937 de Juan Pedro Domecq se encarga de la ganadería su hijo, Juan Pedro Domecq y Díez. Tanto sus compañeros ganaderos como analistas y toreros han declarado que creó un encaste propio, depurando y mejorando el concepto bravura. Dio paso a una nueva definición de bravura, desde que sale el toro de toriles hasta que muere, lo que él denominó “bravura integral”. Los toros de este encaste suelen ser bajos de agujas, finos de piel y de proporciones armoniosas. Las encornaduras son buenas, tienen un desarrollo medio, pudiendo crecer en forma de gancho o gatillo (engatillados). El cuello es largo y descolgado, el morrillo bien desarrollado y la papada no es muy desarrollada. Los pelos predominantes son negros, colorados, castaños, tostados; los jaboneros y ensabanados aparecen por la influencia de la casta Vazqueña, algo que en el último lustro podemos ver con más asiduidad. Entre las particularidades complementarias está el listón, chorreado, jirón, salpicado, burraco, gargantillo, ojo de perdiz, bociblanco y albardado, entre otros. En cuanto al comportamiento, este encaste conserva la cualidad ir a más. Se arranca pronto y lo hace galopando con alegría y fijeza en los trastos de torear. Dado que el legado de Juan Pedro Domecq y Díez terminó en 1975, algunos de los ganaderos que le compraron ganado han conseguido desarrollar un tipo de toro con características físicas y de comportamiento diferentes según la personalidad de cada criador.

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El histórico ganadero Borja Domecq fallece en el Hospital de Mérida por coronavirus

(mundotoro.com 3-23-20)

El histórico ganadero Borja Domecq Solís ha fallecido este lunes a los 74 años de edad a consecuencia de una neumonía provocada por el coronavirus en el Hospital de Mérida, donde se encontraba ingresado desde hace dos días.

Relacionado siempre con la ganadería, Borja Domecq tomó las riendas en solitario del hierro de Jandilla, cuando su hermano Fernando, que falleció el pasado mes de mayo, creó la ganadería de Zalduendo.

Borja Domecq Solís era nieto de Juan Pedro Domecq y Núñez de Villavicencio, hijo de Juan Pedro Domecq y Díez; y hermano de Juan Pedro y Fernando Domecq Solís, ambos ya fallecidos.

La ganadería de Jandilla ha sido una de las protagonistas de los grandes hitos de la Tauromaquia en las plazas de España y Francia. Borja Domecq fue capaz de crear un toro que por su bravura y clase deleitó a los toreros y a los aficionados. En 2002 creó la ganadería de Vegahermosa, un segundo hierro con la misma procedencia que el original.

A finales de octubre de 2016, Borja Domecq dejó las riendas de su ganadería en manos de su hijo Borja, aunque nunca se ha separado de la ganadería.

Borja Domecq Solís nació en Pamplona, a la que siempre ha guardado un cariño especial y donde ha cosechado importantes triunfos de ganadero. Se casó con Fátima Noguera Espinosa y tuvo dos hijos, Borja y Fátima.

https://www.mundotoro.com/noticia/fallece-borja-domecq-ganaderia-jandilla-coronavirus/1552333

Lagunajanda

 

 

Propietario

Lagunajanda S.L.

Representante

Dª. María Domecq Sáinz de Rozas.

Señal

Orejisanas ambas.

Fincas

Jandilla, El Horcajo y El Manzanal, Vejer de la Frontera (Cádiz).

Procedencia

Domecq Díez – Salvador Domecq.

Antigüedad

11/05/2007
 

Antecedentes

Esta ganadería fue creada en 1997 con vacas y sementales de la ganadería "Toros de El Torero". Ésta última fue creada en 1968 por Salvador Domecq Díez al separarse de sus hermanos, Juan Pedro y Pedro, con el traspaso de la tercera parte que le correspondía, pasando a anunciarse "Toros de El Torero".

Encaste

ENCASTE JUAN PEDRO DOMECQ DÍEZ El fundador de esta estirpe de ganaderos, Juan Pedro Domecq y Núñez de Villavicencio, compró a principios de 1930 la ganadería del Duque de Veragua a Manuel Martín Alonso, quien se había hecho con el hierro ducal dos años antes. Juan Pedro hizo caso de las recomendaciones que le dio el también ganadero Ramón Mora Figueroa y entre 1930 y 1931 adquirió al Conde de la Corte cuatro sementales, Llorón, Carabello, Chucero y Bodeguero, así como dos puntas de vacas. Tras el fallecimiento del fundador, en 1937, se encargó de la ganadería su hijo, Juan Pedro Domecq y Díez, quien añadió reses de Mora Figueroa, con sangre Conde de la Corte y García Pedrajas, ambas de origen Parladé. Los toros de este encaste suelen ser bajos de agujas, finos de piel y de proporciones armoniosas. Las encornaduras tienen un desarrollo medio, pudiendo crecer en forma de gancho o gatillo (engatillados). El cuello es largo y descolgado, el morrillo bien desarrollado y no tanto la papada. Los pelos predominantes son negros, colorados, castaños y tostados. Pueden aparecer los jaboneros y ensabanados por la influencia de la casta vazqueña. En cuanto al comportamiento, este encaste conserva la cualidad de ir a más. Se arranca pronto y lo hace galopando, con alegría y fijeza en los trastos de torear. Dado que el legado de Juan Pedro Domecq y Díez terminó en 1975, algunos de los muy numerosos criadores que le compraron ganado han conseguido desarrollar un tipo de toro con características físicas y de comportamiento diferentes, según la personalidad y loa criterios de cada uno de ellos. Taurodelta

El Montecillo

(more to come)

Santiago Domecq

 

 

Propietario

Jaime Juan S.A.

Representante

D. Santiago Domecq Bohórquez.

Señal

Brincada en ambas.

Fincas

Garcisobaco, Ragitán y Montifartillo, Jerez de la Frontera (Cádiz).

Procedencia

Torrestrella y Domecq Díez.

Antigüedad

09/04/1961
 

Antecedentes

En septiembre de 1949 Pedro Domecq y Rivero (Marqués de Domecq D’Usquain) adquirió esta ganadería, agregándole en principio reses de Juan y José Belmonte y posteriormente, en 1951, de Juan Guardiola. En 1955 Pedro Domecq vendió la ganadería a José Villar Vega, el cual la enajenó en 1959 a los señores Núñez Hermanos, quienes a su vez la vendieron a José Luis y Pablo Martín Berrocal. En 1981 fue nuevamente adquirida por los hermanos Núñez, vendiéndola en 1983 a su actual propietario, quien, con posterioridad, agregó a las reses de Núñez adquiridas otras de procedencia Torrestrella, Jandilla y Juan Pedro Domecq.

Encaste

ENCASTE TORRESTRELLA Toma nombre este encaste de la ganadería creada por don Álvaro Domecq y Diez a partir del año 1954, cuando inicia su aventura en solitario como criador, al margen de la ganadería de su hermano, Juan Pedro Domecq y Díez. Álvaro Domecq combina reses del Duque de Braganza (Veragua + Conde de la Corte) con reses de Carlos Nuñez y reses de sus hermanos (Juan Pedro Domecq). Es hoy un encaste definido en tipo y comportamiento. El de Torrestrella es un toro de formas más "vazqueñas" (influencia del toro de Braganza) aunque su comportamiento nada tenga que ver con el toro de hace cien años. Se trata de un animal muy hondo, poco descolgado, escondiendo el cuello a veces en un morrillo rematado y de amplios pechos y grupas, variado de pelo y serio de cara. Toro fuerte y de aspecto serio, capaz de pasar el fielato de las plazas del toro amplio. Sin embargo su mejor comportamiento se desarrolla en los toros de menor tamaño aunque conserve la tipología descrita. Un animal enrazado, combativo y fuerte, de embestidas “picantes”, al que a veces le cuesta humillar por su tipo. Un ejemplar señero y señorial de las vacadas actuales. Todo un producto de la alquimia. UCTL Un Siglo de Toros

Western Horseman: Yesterday and Today

by Randy Witte westernhorseman.com

Western Horseman magazine began in 1936, which makes it one of the oldest horse magazines in the world. To glance back at the magazine's history is to survey much of the history of the horse industry in North America, because Western Horseman was there to champion the formation of breed associations and registries, research and record horse history, and publish accounts of the care, breeding, and use of horses through the decades.

When the first issue was printed and distributed in January 1936, interest in horses was waning in the United States. Founding Editor and Publisher Paul Albert knew it all too well as he watched horses being displaced by automobiles and tractors, and promptly dispatched to the slaughterhouses.

Paul later wrote of that era: "Horses were worth practically nothing and thousands were being slaughtered each year for dog food, the dog having replaced the horse in public affection and the machine having discarded the horse in transportation and power." He created The Western Horseman as a voice for the horse, to show people that horses were still useful in a variety of ways on farms and ranches, and that they could have a bright future as recreational animals. The magazine's motto was, "For the Admirer of the Western Stock Horse."

Paul, his wife, Worth, and a secretary and friend named Dorothy Smith made up the magazine staff. They worked "within the lighted circle of the kerosene lamp," Worth later wrote, in the Albert's' ranch house. Their ranch was located in the rolling hills near Lafayette, Calif., about 20 miles from San Francisco. There Paul and Worth ran a small herd of cattle, bred Arabian horses and did their best to keep western riding alive. They operated a "one-day dude ranch" on weekends, hosting visitors who paid 75 cents for an hour's horseback ride.

By the time that first issue of The Western Horseman appeared, Paul had quit his job as a traveling salesman for heavy equipment to devote full time to the ranch and to publishing the magazine. Worth recalled that "finances were nil. But with the idea and a stubborn determination, scraping here and pinching there, we finally managed $200 to edit and print our first issue."

That first issue of the magazine sold for 30 cents per copy, with subscriptions listed at $1 per year. Included was news on horse shows and rodeos, technical advice, and the first in a series of well-researched articles written by Paul and titled "The Romance of the American Stock Horse."

Bob Denhardt was an early contributor to the magazine, and served years later as its editor, after he had been instrumental in the formation of the American Quarter Horse Association. He was a student at the University of California at Berkeley when The Western Horseman was launched, and came to the Albert's' ranch looking for a place to ride.

In the January 1937 issue, author F.D. Haines wrote about the remnants of a breed of horse called the Palouse, a name which some had corrupted into Appaloosa, he explained. There weren't many Appaloosas left, he wrote, and urged those who had them to "register and establish the type before it is too late." The Appaloosa Horse Club was organized in 1938.

Paul wrote an editorial in that same 1937 issue urging preservation of the Western horse. Remember, this was prior to the formation of the American Quarter Horse Association (in 1940), and even the name Quarter Horse was not affixed to a particular type of horse.

"A West without cow horses would be a disappointment to everyone," he wrote. "It would pay us to well consider this thought. Some (people) stand calmly by, never lifting a hand to save our gallant friend and greatest attraction, the Western horse. The pages of The Western Horseman are dedicated to this work. It is a good work and an unselfish one."

In the fifth anniversary issue, Paul noted that with the aid of publicity from The Western Horseman, four new horse organizations had formed: the Palomino Horse Association, the Appaloosa Horse Club, the Albino Horse Club and the American Quarter Horse Association.

Paul was only 40 when he died of cancer, and his magazine was only seven, but he lived long enough to see his efforts on behalf of the Western horse begin to pay off. W.K. Albert replaced P.T. Albert on the masthead of the January-February 1943 issue, and Worth remained editor for the next four issues of the magazine.

The Western Horseman was sold to John Ben Snow in the summer of 1943, and moved to the Speidel headquarters in Reno, Nevada. This came about because John Ben was an avid horseman throughout his life, and a top executive at Speidel, a chain of newspapers spanning the country. The Speidel staff put the magazine out until John Ben decided to move it to Colorado Springs in 1948. He lived in town, had a horse and cattle ranch north of the Springs, and felt he could best take the magazine under his wing and help it grow if it was close by. He arranged for construction of the magazine's office on the north side of town in 1949. The two-story structure is patterned after the well-known Palace of the Governors in the old town square in Santa Fe, New Mexico, and is a familiar Colorado Springs edifice in its own right.

The magazine has continued to grow and evolve through the years. The Western Horseman became simply Western Horseman in later years. Logo type, layout and design also have changed whenever the staff felt there was a reason for it, and circulation has expanded to nearly 200,000 subscribers and newsstand buyers. What hasn't changed through the years, however, is the magazine's philosophy. Through 12 editors and four changes in ownership, Western Horseman has remained dedicated to horses and the people who use them, primarily in the West.

After John Ben Snow's death in 1973 at age 89, the magazine became employee-owned, and stayed that way until 2001, when the Western Horseman board of directors and employees voted unanimously to sell to Morris Communications.

Morris owns several newspapers throughout the country, as did Speidel (which later was acquired by Gannett). But Morris also has a variety of magazines, including a handful of horse publications. The Western Horseman staff felt that Morris Communications, headed by W.S. "Billy" Morris III, a dedicated horseman himself, was an ideal company to carry on the philosophy and tradition of Western Horseman in the 21st century.

Western Horseman has been the leader in its category through the years partly because the people who have worked for the magazine also have been involved in the horse industry, with interests ranging from horse shows and rodeo, ranching, trail riding, polo and cutting. No other horse publication carries such a wide variety of topics, which include equine health care, training, breeding, competition, packing and trail riding, ranching, horse and human personality features and historical articles.

Western Horseman has stayed true to its roots, and readers of the publication in 1936 - those who are still with us, typically feel "at home" with the magazine today. Contemporary readers who run across those early issues find them fascinating.

https://shop.westernhorseman.com/pages/about-us

Buckaroo

Broncs & Buckaroos.

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Nevada ranch

Cow horse trainer Nick Dowers works at home with Leroy, a big, brown, snorty gelding he started while competing at Road to the Horse in 2018. The horse presented a tough challenge during the competition, nevertheless Dowers decided to purchase the Four Sixes-bred gelding and train him to be a ranch horse. At first, Leroy kept his defenses up, but in a couple of days Dowers was riding him on the range surrounding his facility in Dyer, Nevada.

South Dakota bull ranch

“I think [ranch work is] the best foundation you can put on a horse,” South Dakota trainer Dale Simanton says. “It’s like sending a kid to high school. You’re supposed to go to high school to learn a new job, and get them ready to go to college. When they’re done here, they’re as good a trail horse as you can find. They walk where you point them. They’re not going to run off because you walked between two trees.”

Vaquero Heritage Days

Held every other year, Vaquero Heritage Days immerses the public in history, horsemanship and gear-making heritage. https://whmag.co/VaqueroHeritageDays

Novilleros en Valencia

March 8th, 2020

The spanish bull, living the good life

Rocio Romero

I will get here someday

Manzanares en Aranda de Duero

February 29, 2020