The order in which the bullfighters and their teams enter the bullring.
EL PASEILLO
El Paseillo es el primer choque visual del espectador con los toreros, sus cuadrillas, alguacilillos y demás empleados de la plaza como los monosabios (quienes asisten a los picadores en el tercio de varas) o los areneros.
Se considera todo un rito, como casi todo lo que el arte del toreo conlleva, con su historia, razón de ser y orden.
Esta ceremonia de salida de cuadrillas en la antigüedad se denominaba “Despeje”, y el término deja bien claro cuál era su función: despejar los aficionados que se encontraban en la arena y que, al toque del clarín, salían de ésta rápidamente para protegerse del eminente inicio de la lidia del toro.
Hoy en día obviamente ya no es así. Todo el mundo se encuentra sentado en sus asientos (o al menos así debería ser) cuando un alegre pasodoble da comienzo al Paseillo.
Los primeros en pisar el ruedo cuando comienza una corrida de toros son los alguacilillos. Es la pareja que sale a caballo, vestida de negro y con sombreros con tocados de plumas o traje de Charro cuando se realiza el festejo en México, y son los encargados de ejecutar las órdenes del presidente y entregar los premios a los toreros. Dan una vuelta al ruedo que simboliza el antiguo despeje del mismo y van a buscar a los componentes del paseíllo.
El orden viene marcado por la antigüedad del diestro que no es por su edad sino por la fecha en que tomó la alternativa. Los tres matadores ocupan la primera línea.
Desde el punto de vista de los propios toreros, a la izquierda irá el más antiguo, en el centro el más “novato” o joven alternativado y a la derecha el otro. Desde el punto de vista del espectador (vista de frente) a la derecha el más antiguo, el centro obviamente no varía. Detrás de ellos marchan sus cuadrillas, los hombres de plata, seguido de dos picadores por cada torero. El orden de ellos viene marcado por la antigüedad de su matador y por la suya propia.
Tras ellos desfilan los monosabios, que les acompañan siempre mientras están picando al toro y les ayudan en caso de ser necesario.
A continuación van los mulilleros con su tiro de mulillas, que son los encargados de recoger del ruedo al toro una vez muerto y sacarlo por la puerta de arrastre.
Cierran el desfile los areneros, que son los encargados de mantener el ruedo en perfecto estado para la lidia.
Es tradición que todos los participantes del festejo se saluden mutuamente deseándose suerte para después iniciar la marcha hacia las tablas en la zona donde se encuentra el presidente de la Plaza (juez), al cual saludan y son correspondidos por él.
Como dato curioso verán que los toreros al hacer el paseíllo llevan la montera puesta sobre sus cabezas. En el caso de que el torero la lleve en su mano significa que es la primera vez que actúa como matador en dicha plaza, llevándola así como forma de respeto.
Por Lu Llanos
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