La emoción llegó en el tercero, un astado muy complicado, mirón y con todo guardado dentro. La lidia de Daniel Sánchez fue fundamental para que el toro no se hiciese el amo del ruedo. En el tercer par, Ismael Mora salió prendido. A partir de ahí, Francisco Montero dejó su alma en el ruedo. No será la faena perfecta, pero logró muletazos por abajo y con la figura encajada. Cada muletazo era de tirar la moneda al aire. El público supo apreciar y entender la faena, pues pocos eran capaz de estar delante. La estocada a entrar o morir puso en pie al público que aplaudió la muerte del novillo, mientras el novillero buscó las tablas llorando. Oreja.
El sexto, alto y basto de hechuras, resultó el mejor del encierro. Francisco Montero se fue a portagayola con el capote de paseo, para después recetarle otra larga rodilla en tierra y varias verónicas que pusieron en pie al tendido. En la muleta, resultó un astado noble con un buen pitón derecho. Montero estructuró una faena tirando mucho de la embestida y jugando con los vuelos. Terminó la faena por manoletinas. Dejó una estocada desprendida y paseó una oreja.
https://www.mundotoro.com/noticia/francisco-montero-a-portagayola-con-el-capote-de-paseo/1435191
-------------------
No comments:
Post a Comment